<< Tras la dictadura de Odría llega al gobierno del Perú el presidente Prado, con quien se iniciaría hacia 1956 una ola de conflictos provocados por la política liberal asumida, con la consecuente repercusión social. A las protestas urbanas se suman las revueltas del campesinado con nuevas estrategias en las serranías peruanas. Es así como el tema de la literatura indigenista de la primera mitad del siglo XX toma un nuevo curso hacia los años 70, cuando salen a la luz las cinco novelas que constituyen el ciclo narrativo de La guerra silenciosa de Manuel Scorza. En ellas se retoma el problema del campesino y del comunero a un nivel mayor, es decir, en el de la lucha latinoamericana frente al imperialismo: los campesinos enfrentados injustamente no sólo a la violencia estructural del país, sino a la prepotencia de las empresas transnacionales. Contrariamente a las novelas de tono social que constituyeron la corriente del indigenismo, Manuel Scorza hace uso de diversos recursos literarios, tomados en gran parte del boom latinoamericano, así como recursos cinematográficos, para presentar de forma ágil y amena, los trágicos acontecimientos ocurridos en unas matanzas de campesinos en la sierra central peruana hacia fines de los años 50 y comienzo de los 60. >>
……………………………………
Huamanchumo, Ofelia (2013): «Protesta social en el discurso simbólico de La guerra silenciosa de Manuel Scorza», en: Huárag, Eduardo (Ed.) Violencia social y política en la narrativa peruana, Lima: Instituto Riva Agüero – Pontificia Universidad Católica del Perú; pp. 249–272.
……………..
Imagen: Portada de la edición digital, 2014 (Fuente: Repositorio Digital IRA-PUCP).